Dr. Jose Antonio Moya Montoya

Doctor en comunicación, periodista y arqueólogo. Profesor del Dpto. de Comunicación y Psicología Social e investigador del Instituto Universitario de Arqueología y Patrimonio Histórico de la Universidad de Alicante. Es profesor en el Máster en Arqueología Náutica y Subacuática de la Universidad de Cádiz. Dirige el Grupo de Investigación ICOMAV de la Universidad de Alicante y es director de la Sede Universitaria de Villajoyosa. En su línea de investigación aborda la documentación, la comunicación y la divulgación de la ciencia, especialmente en el ámbito submarino. Desarrolla metodologías de trabajo documental con técnicas de imagen 2D y 3D en entornos sumergidos. Ha participado en cuatro expediciones científicas a la Antártida con el Instituto Español de Oceanografía y forma parte de numerosos proyectos de investigación en arqueología submarina como el pecio romano Bou Ferrer, el barco fenicio Mazarrón 2, el Pecio del Sec de Mallorca o el proyecto Arqueomallornauta del Consell de Mallorca y las universidades de Cádiz, Barcelona y Mallorca. Codirige el PGI de la Bahía de Xàbia con el Museo Arqueológico de Xàbia y ha dirigido el proyecto de I+D+i MAR DE ESPAÑA, del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.

Viveros de pescado romanos en la costa alicantina y nivel del mar. Primera aproximación

Roman fish hatchery on the Alicante coast and sea level. First approach

De los casi un centenar de viveros de pescado romanos que orlan las costas de la cuenca mediterránea, los únicos de Hispania se encuentran en el litoral alicantino (más otro en medio oceánico, en Cádiz) y todos excavados en rocas blandas (calcarenitas y eolianitas de edad Mioceno y Cuaternario). Son cuatro, en Punta de l’Arenal de Xàbia, Calpe, La Illeta dels Banyets de El Campello y la Albufereta de Alicante). Hasta ahora su estudio se ha dirigido a conocer su funcionalidad, desmintiendo su vinculación a cetariae, y en cambio relacionar su actividad de piscicultura intensiva como parte de grandes y lujosas villae maritimae, excepto el vivero de El Campello con una problemática particular.

En este workshop nos adentramos por primera vez a la vertiente de estudio de estas instalaciones y el nivel marino relativo, con el objeto de poder determinar si ha existido variación de ese nivel desde época romana.

Desde el punto de vista geológico, se constata un levantamiento tectónico regional del entorno de Alicante en un rango máximo de unos 0’4 m. en los últimos 2000 años, mientras que la subida del nivel del mar global se estima en un rango de +0’6 y 0’3 m.

Comparando ambos datos, el cambio tectónico máximo y la subida del nivel del mar global, podemos observar que se encuentran aproximadamente en el mismo rango, es decir podríamos plantear que, para el caso de Alicante, la subida del nivel del mar global en los últimos 2000 años podría total (o en parte) compensada por el levantamiento regional sufrido.

Esta escasa variación del nivel del mar detectable desde época romana se comprueba al analizar las partes de las instalaciones que aseguraban una buena renovación del agua marina (canales, compuertas), así como los andenes perimetrales para el servicio de los operarios (crepidines), en Xàbia y Calpe. Las posiciones de estos elementos respecto al nivel del mar actual indican una situación y próxima a la que en su día diseñaron y tallaron los especialistas romanos. Asimismo, aparece solo una marcada hendidura de erosión en los viveros alicantinos que corresponde a la acción del agua con el nivel actual.

Por último, un modelo experimental realizado con marcadores flotantes y coloración de agua con fluoresceína, nos ha permitido conocer, de manera concreta, la dinámica del flujo de agua en el interior del vivero de la Albufereta que señala hoy una adecuada renovación del agua y por tanto mantener la instalación romana en servicio. Los resultados indican que la construcción del vivero se realizó en base a unos conocimientos previos muy precisos sobre las necesidades biológicas de las especies cultivadas y de la dinámica marina en la zona, de forma que el vivero pudiese garantizar las condiciones necesarias de salinidad, oxigenación y nutrientes para mantener los recursos vivos.

Así pues, al contrario que los viveros de otras regiones mediterráneas, central y oriental, muchos sumergidos debido a movimientos tectónicos, los de la costa alicantina muestran una escasa variación del nivel del mar en los últimos 2000 años, siendo por tanto instalaciones que pueden mostrar de manera clara y evidente el sistema de funcionamiento originario.

Of the almost one hundred Roman fish tanks that line the coasts of the Mediterranean basin, the only ones in Hispania are on the Alicante coast (plus another in the middle of the ocean, in Cadiz) and all of them are excavated in soft rocks (calcarenites and eolianites of Miocene and Quaternary age). There are four of them, in Punta de l’Arenal in Xàbia, Calpe, La Illeta dels Banyets in El Campello and Albufereta in Alicante). Until now, their study has focused on their functionality, denying their link to cetariae, and instead relating their intensive fish farming activity as part of large and luxurious villae maritimae, except for the fish tank in El Campello with a particular problem.

This is the first time that we have studied these installations and the relative sea level, with the aim of determining whether there has been any variation in the sea level since Roman times.

From a geological point of view, a regional tectonic uplift of the Alicante area has been observed in a maximum range of 0.4 m. in the last 2000 years, while the global sea level rise is estimated in a range between +0.6 and 0.3 m.

Comparing both data, the maximum tectonic change and the global sea level rise, we can observe that they are approximately in the same range, i.e. we could argue that, in the case of Alicante, the global sea level rise in the last 2000 years could be totally (or partially) compensated by the regional uplift suffered.

This scarce variation in sea level detectable since Roman times can be verified by analysing the parts of the installations that ensured a good renewal of sea water (canals, floodgates), as well Hgo as the perimeter platforms for the service of the operators (crepidines), in Xàbia, Calpe and El Campello. The positions of these elements with respect to the current sea level indicate a situation close to that which was once designed and carved by Roman specialists. Likewise, there is only one marked erosion indentation in the Alicante fish tanks that corresponds to the action of water at the current sea level.

Finally, an experimental model carried out with floating markers and fluorescein water staining has allowed us to know, in a concrete way, the dynamics of the water flow inside the Albufereta fish tank, which today indicates an adequate renewal of the water and, therefore, to keep the Roman installation in service. The results indicate that the fish tank was built on the basis of very precise prior knowledge of the biological needs of the species cultivated and the marine dynamics in the area, so that the nursery could guarantee the necessary conditions of salinity, oxygenation and nutrients to maintain the living resources.

Thus, unlike the fish farms in other Mediterranean regions, both central and eastern, many of which have been submerged due to tectonic movements, those on the Alicante coast show little variation in sea level over the last 2000 years, and are therefore installations that can clearly and evidently show the original system of operation.