Albalat (Cáceres) en el periodo Almóravide: urbanismo y registro material antes de 1142
Se propone un breve balance del conocimiento sobre el yacimiento de Albalat (al-Balāṭ), hoy en la provincia de Cáceres. Si bien el estatus de esta población fortificada es algo confuso a lo largo del tiempo, su función de control de un paso del río Tajo le otorgó una evidente importancia económica y militar. Este hecho explica por qué se convirtió a finales de la época taifa en blanco de los ataques cristianos y justifica los esfuerzos de los musulmanes por mantenerlo como baluarte en esta parte de la frontera. Los trabajos previos a las excavaciones, dilatados en el tiempo, documentaron un barrio extramuros, un hammām y un cementerio y, sobre todo, varias fases constructivas de su recinto amurallado. Sin embargo, nada dejaba prever la organización intramuros, donde las actuaciones arqueológicas se han centrado desde 2009, descubriendo un denso entramado urbano articulado a lo largo de una red vial grosso modo ortogonal. Edificios de carácter doméstico lindan con un sector dedicado a actividades metalúrgicas con una clara dimensión productiva y comercial.
La guerra, y sobre todo, el asedio que marcó el final de la ocupación estable a mediados del s. XII, ha dejado una impronta inequívoca en el registro arqueológico a través de numerosos dardos y proyectiles. Este peculiar contexto, que conllevó saqueos y destrucciones sistemáticas por incendio, ha permitido la conservación in situ de un relativo abundante material. Si los objetos cerámicos resultan muy interesantes por su tipología, característica de una etapa de transición, no menos lo son restos metálicos, óseos y líticos (por no mencionar los restos carpológicos, antracológicos o faunísticos) por los datos que aportan sobre diversos aspectos de la vida cotidiana, las artesanías locales o de las expresiones de religiosidad popular.