Reuniones Científicas en el MARQ

Dr. José Luis Menéndez Fueyo

Dr. José Luis Menéndez Fueyo

MARQ Museo Arqueológico de Alicante. MARQ Museu Arqueològic d'Alacant. MARQ Archaeological Museum of Alicante.

Biography

Doctor en Historia por la Universidad de Alicante y actualmente ejerce, desde 1996 en el equipo del Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) y desde el año 2000 como Técnico de Exposiciones de dicho museo. Es miembro del equipo técnico creador del MARQ Museo Arqueológico de Alicante en el que actuó de coordinador general y director técnico de las salas de Edad Media y Edad Moderna y Contemporánea entre los años 1998-2002. 

Sus trabajos están centrados esencialmente en la Arqueología Medieval del mundo feudal, en varias de sus vertientes. Ha realizado diferentes estudios de materiales cerámicos, entre los que destaca el conjunto documentado en la Basílica de Santa María de Alicante. Igualmente, se ha dedicado al análisis castellológico de algunas fortificaciones de época medieval y moderna como los casos de Polop, Castalla, Planes, Perputxent, el sistema defensivo costero durante el siglo XVI-XVIII. 

Ha dirigido los proyectos arqueológicos en el castillo de Polop, Castillo de Planes, Castillo de Castalla o en las cubiertas de la Basílica de Santa María de Alicante. Actualmente, desde el año 2005, dirige el proyecto arqueológico de investigación en la Pobla medieval de Ifach (Calp). Asimismo, dirige el equipo de investigación arqueológica en el Castell de Perputxent y en el Castell de Planes. También ha co-dirigido, junto a Sonia Gutiérrez Lloret y Pierre Guichard, el proyecto en el conjunto arqueológico islámico del Castellar d’Elx. Ha pertenecido a los equipos de investigación en el Ribat Califal de las Dunas de Guardamar, en el Castell d’Ambra en Pego, del Castillo de la Atalaya de Villena, de la Torre de les Caletes de Benidorm y en el lugar medieval de Xinorla en Monóvar.

Ha gestionado proyectos científicos de carácter europeo, siendo Director del Proyecto Europeo MERCATOR, la vía de los mercaderes, la ciudad de los mercados entre 2007-2009. Ha sido miembro de los proyectos Lectura arqueológica del uso social del espacio: Espacios domésticos y vida social entre la Antigüedad y el Medievo (HAR20212-34035); El sitio de las cosas: relación entre la cultura material y los espacios construidos a la luz de la arqueología (ss. VI-XIV) (HAR2015-67111-P) y actualmente es miembro del proyecto AICO de la Generalitat Valenciana L’espai domèstic i la cultura material ven el regne medieval de València. Una visió interdisciplinar. AICO/2020/044. 

Es autor de más de cien publicaciones entre ellas libros, edición de varias publicaciones, capítulos de libros, artículos en revistas científicas y actas de congresos nacionales e internacionales. Es miembro de la Asociación Española de Arqueología Medieval (AEAM), de la Sociedad Española de Estudios Medievales (SEEM) y de la Asociación de Historiadores de la Corona de Aragón (HISCOAR – Societas Historicorum Coronae Aragonum). Fue director de la revista CASTELLS editada por la sección provincial de Alicante de la Asociación de Amigos de los Castillos (AEAC), siendo actualmente secretario de la revista MARQ. Arqueología y Museos que edita el MARQ Museo Arqueológico de Alicante.

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RESUMEN PONENCIA


PONENCIA 2:

La cultura material de las sociedades feudales en la construcción territorial del área meridional del Reino de Valencia. Balance y perspectivas de trabajo

La investigación sobre la cultura material en los siglos XIII al XV siempre ha transitado entre dos grandes líneas de trabajo que, hasta ahora, han discurrido de forma paralela. Por un lado, la aportación de la documentación de archivo mostrada en las actas notariales, los inventarios post-mortem y los registros de las almonedas han generado una importante línea de trabajo desarrollada por los departamentos universitarios de Historia Medieval gracias a la riqueza y variedad de fuentes con las que contamos para los tiempos medievales, que está muy por encima de la mayoría de regiones de Europa, lo que podría convertir nuestro caso valenciano en un referente a escala continental en el tema que aquí nos ocupa.

Por otro lado, se encuentra una arqueología de las sociedades feudales que podíamos calificar amablemente como «voluntariosa», siempre situada «a las afueras del medievalismo«, reutilizando la expresión acuñada por Miquel Barceló en 1988, en esa extraña franja fronteriza existente entre el escaso interés promovido desde los departamentos universitarios y la preferencia casi exclusiva de la investigación de este período al repertorio documental bajo el caduco axioma “La arqueología propone, el medievalismo dispone”. Aún, miramos a mucha distancia y con cierta envidia a nuestra hermana, la arqueología andalusí, dotada de un aparato de proyectos y de discusión científica sin parangón, donde la aportación del registro material se ha mostrado fundamental para entender los principales procesos ocurridos entre los siglos VIII al XIII. 

Esa arqueología, de vocación totalmente urbana y unos pocos yacimientos de referencia en ámbito rural, ha estado marcada por un enorme número de intervenciones de urgencia y una ausencia de dotaciones presupuestarias, pero que ha generado un abundante registro material extraído de contextos cronológicos de los siglos XIII, XIV y XV, cuya información es potencial, ya que aún se encuentra latente en los almacenes de decenas de museos y servicios municipales del territorio valenciano, a la espera de una adecuada atención. 

Con lo que sí contamos es con un inmenso cuerpo de auténtica literatura administrativa, integrado por cientos de informes preliminares y tomos de interminables memorias, lo que hace que esta arqueología de la intervención que aún esté carente de su necesaria conversión en una arqueología del conocimiento histórico. Sin lugar a dudas, ahora hay más datos y mejor documentados que en ninguna época anterior. Tenemos una documentación abrumadora, lo que debe a la vez congratularnos y preocuparnos. Felicitarnos por haber alcanzado en estos últimos 30 años un fuerte grado de maduración teórica y metodológica sin precedentes anteriores e inquietarnos porque con semejante documentación sin igual, seguimos muy escasos de conocimiento científico, ése que realiza a través de la investigación. Por ello, es necesario convocar foros científicos como el que nos encontramos para sacar a la luz una pequeña parte de todo este registro. 

El objetivo en esta intervención será hacer un balance de la situación de la investigación de la cultura material de las sociedades feudales basándose fundamentalmente, en los datos recogidos en nuestra parcela de trabajo que es el área meridional del reino medieval de Valencia.   

 

La cultura material de les societats feudals en la construcció territorial de l’àrea meridional del Regne de València. Balanç i perspectives de treball

La investigació sobre la cultura material en els segles XIII al XV sempre ha transitat entre dues grans línies de treball que, fins ara, han discorregut de manera paral·lela. D’una banda, l’aportació de la documentació d’arxiu mostrada en les actes notarials, els inventaris post mortem i els registres de les almonedes han generat una important línia de treball desenvolupada pels departaments universitaris d’Història Medieval gràcies a la riquesa i varietat de fonts amb les quals comptem per als temps medievals, que està molt per damunt de la majoria de les regions d’Europa, la qual cosa podria convertir el nostre cas valencià en un referent a escala continental en el tema que ací ens ocupa.

D’altra banda, es troba una arqueologia de les societats feudals que podíem qualificar amablement com a «voluntariosa», sempre situada «als afores del medievalisme», reutilitzant l’expressió encunyada per Miquel Barceló en 1988, en aqueixa estranya franja fronterera existent entre l’escàs interés promogut des dels departaments universitaris i la preferència quasi exclusiva de la investigació d’aquest període al repertori documental sota el caduc axioma «L’arqueologia proposa, el medievalisme disposa». Encara, mirem a molta distància i amb una certa enveja a la nostra germana, l’arqueologia andalusina, dotada d’un aparell de projectes i de discussió científica sense parangó, on l’aportació del registre material s’ha mostrat fonamental per a entendre els principals processos ocorreguts entre els segles VIII al XIII.

Aqueixa arqueologia, de vocació totalment urbana i uns pocs jaciments de referència en àmbit rural, ha estat marcada per un enorme nombre d’intervencions d’urgència i una absència de dotacions pressupostàries, però que ha generat un abundant registre material extret de contextos cronològics dels segles XIII, XIV i XV, la informació dels quals és potencial, ja que encara es troba latent en els magatzems de desenes de museus i serveis municipals del territori valencià, a l’espera d’una adequada atenció.

Amb el que sí que comptem és amb un immens cos d’autèntica literatura administrativa, integrat per centenars d’informes preliminars i toms d’interminables memòries, la qual cosa fa que aquesta arqueologia de la intervenció que encara estiga mancada de la seua necessària conversió en una arqueologia del coneixement històric. Sense cap dubte, ara hi ha més dades i més ben documentats que en cap època anterior. Tenim una documentació aclaparadora, la qual cosa deu alhora congratular-nos i preocupar-nos. Felicitar-nos per haver aconseguit en aquests últims trenta anys un fort grau de maduració teòrica i metodològica sense precedents anteriors i inquietar-nos perquè amb semblant documentació sense igual, seguim molt escassos de coneixement científic, aquest que realitza a través de la investigació. Per això, és necessari convocar fòrums científics com el que ens trobem per a traure a la llum una xicoteta part de tot aquest registre.

L’objectiu en aquesta intervenció serà intentar, en la mesura de les possibilitats, fer un balanç de la situació de la investigació de la cultura material de les societats feudals basant-se fonamentalment, en les dades recollides en el nostre espai de treball que és l’àrea meridional del regne medieval de València.

 

The material culture of feudal societies in the territorial construction of the southern area of the Kingdom of Valencia. Evaluation and working prospectives

Research on material culture in the 13th to 15th centuries has always moved between two main lines of work which, until now, have run in parallel. On the one hand, the contribution of archival documentation in the form of notarial records, post-mortem inventories and auction records has generated an important line of work developed by the university departments of Medieval History thanks to the wealth and variety of sources we have for medieval times, which is far superior to most regions in Europe, which could make our Valencian case a benchmark on a continental scale in the subject that concerns us here.

On the other hand, we find an archaeology of feudal societies that we could kindly describe as «voluntary», always situated «on the outskirts of medievalism», to reuse the expression coined by Miquel Barceló in 1988, in that strange borderline between the scant interest promoted by university departments and the almost exclusive preference of research into this period for the documentary repertoire under the outdated axiom «Archaeology proposes, medievalism disposes». Even so, we look at our sister, Andalusian archaeology, from a distance and with a certain envy, with an unparalleled apparatus of projects and scientific discussion, where the contribution of the material record has proved fundamental to understanding the main processes that took place between the 8th and 13th centuries. 

This archaeology, with a totally urban vocation and a few sites of reference in rural areas, has been marked by an enormous number of emergency interventions and a lack of budgetary allocations, but it has generated an abundant material record extracted from chronological contexts of the 13th, 14th and 15th centuries, whose information is potential, as it is still dormant in the warehouses of dozens of museums and municipal services in Valencia, awaiting appropriate attention. 

What we do have is an immense body of authentic administrative literature, made up of hundreds of preliminary reports and volumes of endless memoirs, which means that this archaeology of intervention still lacks the necessary conversion into an archaeology of historical knowledge. Undoubtedly, there is now more and better documented data than ever before. We have an overwhelming documentation, which should both congratulate and worry us. We should congratulate ourselves for having reached in the last 30 years a strong degree of theoretical and methodological maturity without previous precedents, and we should be concerned because with such unparalleled documentation, we are still very short of scientific knowledge, that which is achieved through research. It is therefore necessary to convene scientific forums such as the one we are in to bring a small part of this record to light. 

The aim of this intervention will be to take stock of the situation of research into the material culture of feudal societies, based fundamentally on the data collected in our area of work, which is the southern area of the medieval kingdom of Valencia.   

 

 


PONENCIA 15:

D. Javier Martí Oltra, Ayuntamiento de Valencia

Dr. Jose Luis Menéndez Fueyo, MARQ Museo Arqueológico de Alicante

D. Joaquín Pina Mira, Arqueólogo medievalista

Un aroma de cotidianidad. Los contextos de cerámica medieval en el reino de Valencia durante los siglos XIII y XIV

Desde hace cierto tiempo el medievalismo ha dado en interesarse por la vida doméstica, por aquellos comportamientos que se desarrollan dentro de la vivienda familiar y en el ámbito de lo privado, y por la cultura material relacionada con ellos.

La cultura material, entendida como el conjunto de bienes tangibles creados, usados, preservados, transformados o destruidos por una comunidad dada, es un objeto de estudio teóricamente descomunal, inabarcable. En la práctica, sin embargo, el tiempo o los canales por medio de los cuales estudiamos dicho universo se encargan de hacer un triaje. Sólo una pequeñísima parte de los bienes materiales subsisten al paso del tiempo, aún en forma fragmentaria, incorporados al depósito arqueológico; sólo una porción infinitesimal de dichos bienes tiene el valor crematístico o emocional como para ser preservados a lo largo de generaciones y acabar así en manos de coleccionistas o en depósitos de museos; sólo una parte puramente azarosa de los reiterados inventarios que seguían a cualquier transmisión de bienes ha llegado hasta nuestros archivos.

Con eso, y con la impagable ayuda de la iconografía, tratamos de reconstruir la cultura material de la vida doméstica en la Edad Media, inferir los procesos de producción de las infinitas manufacturas, sus canales de distribución o sus formas de uso.

A este respecto, el sesgo del registro arqueológico es indudable: la inmensa mayoría del material orgánico desaparece. Sin embargo, subsiste el registro cerámico, y esa fracción del total es coherente con el lugar donde excavamos y con el espacio que ocupa el estrato. Y lo que es más importante, es consistente, coherente con todos los elementos que lo componen. De ahí le viene su principal virtud: por más que sea fragmentaria, muestra una visión correcta de la realidad, con su terca monotonía y su riqueza de matices. Por eso es adecuado para percibir la cotidianidad, la permanencia, los pilares de la vida doméstica.

La ponencia reflexionará sobre el conocimiento que tenemos del repertorio cerámico desde la conquista feudal hasta finales del siglo XIV, sobre los repertorios y las características del mismo en función de los contextos.

 

Un flaire de quotidianitat. Els contextos de ceràmica medieval en el regne de València durant els segles XIII i XIV

Des de fa cert temps el medievalisme ha donat a interessar-se per la vida domèstica, per aquells comportaments que es desenvolupen dins de l’habitatge familiar i en l’àmbit del privat, i per la cultura material relacionada amb ells.

La cultura material, entesa com el conjunt de béns tangibles creats, usats, preservats, transformats o destruïts per una comunitat donada, és un objecte d’estudi teòricament descomunal, inabastable. En la pràctica, però, el temps o els canals per mitjà dels quals estudiem aquest univers s’encarreguen de fer un triatge. Només una molt part menuda dels béns materials subsisteixen al pas del temps, encara en forma fragmentària, incorporats al depòsit arqueològic; només una porció infinitesimal d’aquests béns té el valor crematístic o emocional com per a ser preservats al llarg de generacions i acabar així en mans de col·leccionistes o en depòsits de museus; només una part purament atzarosa dels reiterats inventaris que seguien a qualsevol transmissió de béns ha arribat fins als nostres arxius.

Amb això, i amb la impagable ajuda de la iconografia, tractem de reconstruir la cultura material de la vida domèstica en l’Edat mitjana, inferir els processos de producció de les infinites manufactures, els seus canals de distribució o les seues formes d’ús.

Referent a això, el biaix del registre arqueològic és indubtable: la immensa majoria del material orgànic desapareix. No obstant això, subsisteix el registre ceràmic, i aqueixa fracció del total és coherent amb el lloc on excavem i amb l’espai que ocupa l’estrat. I el que és més important, és consistent, coherent amb tots els elements que ho componen. D’ací li ve la seua principal virtut: per més que siga fragmentària, mostra una visió correcta de la realitat, amb la seua tossuda monotonia i la seua riquesa de matisos. Per això és adequat per a percebre la quotidianitat, la permanència, els pilars de la vida domèstica.

La ponència reflexionarà sobre el coneixement que tenim del repertori ceràmic des de la conquesta feudal fins a finals del segle XIV, sobre els repertoris i les característiques del mateix en funció dels contextos.

 

A scent of everyday. The contexts of medieval ceramics in the kingdom of Valencia during the 13th and 14th centuries

For some time, medievalism has become interested in domestic life, in those behaviors that are developed within the family home and in the private sphere, and in the material culture related to them.

Material culture, understood as the set of tangible goods created, used, preserved, transformed or destroyed by a given community, is a theoretically enormous, incomprehensible object of study. In practice, however, the time or the ways through which we study our universe are in charge of making a triage. Only a very small part of the material goods subsist over time, even in a fragmentary way, incorporated into the archaeological deposit; only an infinitesimal portion of goods has the economical or emotional value to be preserved over generations and thus end up in the hands of collectors or in museum deposits; only a purely random part of the repeated inventories that followed any transfer of goods has reached our archives.

With that, and with the invaluable help of iconography, we try to reconstruct the material culture of domestic life in the Middle Ages, infer the production processes of the infinite manufactures, their distribution channels or their forms of use.

In this regard, the bias of the archaeological record is unquestionable: the vast majority of organic material disappears. However, the ceramic record subsists, and that fraction of the total is coherent with the place where we excavated and with the space that the stratum occupies. And what is most important, it is consistent, coherent with all the elements that compose it. This is where its main virtue comes from: no matter how fragmentary it is, it shows a correct vision of reality, with its stubborn monotony and its wealth of nuances. That is why it is suitable for perceiving everyday life, permanence, the pillars of domestic life.

The paper will reflect on the knowledge we have of the ceramic repertoire from the feudal conquest until the end of the 14th century, on the repertoires and its characteristics depending on the contexts.